Tradicionalmente el uso de las piscinas se ha asociado al calor, especialmente al verano. Pero puedes disfrutar de tu piscina prácticamente todo el año si cuentas con una cubierta que la proteja. Estas construcciones no solo te van a permitir poder bañarte en cualquier época del año prácticamente, sino que ofrecen otra serie de ventajas interesantes.
Las cubiertas de piscina disminuyen la evaporación del agua. Sobre todo en meses calurosos o en zonas que cuenten con muchas horas de sol al año, la evaporación puede suponer un gasto de agua importante. Si instalas una de estas cubiertas vas a conseguir un significativo ahorro de agua perdida por la evaporación.
Estas instalaciones, al permitir el paso de luz solar, facilitan un aumento de temperatura, que en algunas ocasiones puede llegar hasta los 4 grados en relación con el exterior. Este microclima te va a permitir usar la piscina en días no tan cálidos como los del verano, sin necesidad de recurrir a calentadores o aparatos similares.
Otra gran ventaja que tienen las piscinas que cuentan con cubiertas es la de la higiene. La cubierta va a impedir que lleguen a la piscina elementos externos que puedan ensuciarla, como ramas, hojas o basura arrastrada por el aire. Su posterior limpieza y mantenimiento te resultarán más cómodos. Al haber menos residuos en la piscina no será necesaria la misma cantidad de cloro que necesitaríamos si la piscina no tuviera cubierta, ahorrando también en este compuesto. Asimismo, es interesante recordar que las cubiertas impiden una incidencia elevada de rayos ultravioleta, los cuales deterioran el cloro. Por tanto vamos a ahorrar bastante dinero en este producto si instalamos una cubierta en la piscina.
Si no queremos llevar a cabo una obra de esa magnitud en nuestra piscina, tenemos la opción de cubrirla con un toldo. Las ventajas que vamos a conseguir son las mismas o muy similares a las que obtendríamos si protegemos la piscina con una cubierta. El toldo va a mantener el agua limpia, al evitar que lleguen ramas, maleza, insectos u otro tipo de compuestos que puedan acumularse y ensuciar el agua. Por tanto, su mantenimiento será más fácil, además de necesitar menos productos químicos y, por consiguiente, disminuir gastos.
Otro aspecto destacable de contar con un toldo es el de la seguridad. Al estar la piscina tapada, vamos a poder evitar accidentes como por ejemplo una caída eventual a la piscina. Sobre todo en casas donde hay niños es importante que la piscina esté cubierta en todo momento y se impida que nadie caiga en ella. Por último, un toldo va a evitar la evaporación del agua, disminuyendo su consumo.
Las cubiertas y toldos nos van a ayudar a conseguir unas piscinas sostenibles y van a facilitar su mantenimiento. En Piscinas Jose somos especialistas desde hace más de diez años en la construcción de cubiertas y toldos. Para que puedas tener tu piscina a punto todo el año, no dudes en contactar con nosotros.